La cultura egipcia antigua se desarrolló en el noreste africano (márgenes del río Nilo) entre 3.200 a.C (unificación del norte y sur) a 32 a.C (dominio romano).
Instalada en el extremo noreste de África, en una región caracterizada por la existencia de desiertos y por la vasta llanura del río Nilo.
La civilización egipcia se formó a partir de la mezcla de diversos pueblos, entre ellos, los míticos, los semitas y los nubios, que surgieron en el Período Paleolítico.
Los primeros núcleos poblacionales sólo comenzaron a formarse durante el Período Neolítico, donde las comunidades pasaron a dedicarse más a la agricultura que la caza o la pesca.
Alrededor de 4000 a.C, los antiguos núcleos han dado paso a unidades políticas más pequeñas, los nomos, que se rigen por nomarcas, se reunieron en dos reinos, uno de Bajo Egipto en el norte y otro del Alto Egipto, al sur.
Alrededor de 3200 a.C, Menés, el gobernante del Alto Nilo, unificó los dos reinos y se convirtió en el primer faraón , dando lugar al período dinástico, que se pueden dividir en tres períodos distintos: Imperio Antiguo, Imperio Medio y el Imperio Nuevo.
Etapas de la Historia del Antiguo Egipto: Periodo Dinástico
– Antiguo Imperio: de 3.200 a.C hasta 2.100 a.C
– Reino Medio : 2100 a.C a 1580 a.C
– Nuevo Imperio: de 1.580 a.C hasta 715 a.C
Imperio Antiguo (3200 – 2300 a.C)
El momento en que se completó la unificación de Egipto. La capital egipcia pasó a ser Túnez y luego trasladada a Menfis, en la Región de El Cairo (capital actual de Egipto).
Los sucesores de Menés permanecieron en el poder por más de un milenio y durante todo ese período el Egipto antiguo vivió un aislamiento casi completo. El faraón poseía el poder supremo, siendo considerado una encarnación del propio dios Rá (el Sol). Su presencia era imprescindible hasta para las inundaciones del Nilo, en las épocas correctas del año.
El faraón, considerado una divinidad, gobernaba con poder absoluto. Entre 2700 y 2600 a.C, se construyeron las pirámides de Giza, el faraón asignado a Keops, Kefrén y Mecerinos.
Durante esta fase de la historia egipcia, la capa sacerdotal adquirió gran influencia y riqueza. Se construyeron las tres grandes pirámides de Giza, atribuidas a los faraones Keops, Kefrén y Mecerinos. En la nueva capital, Menfis, había grandes existencias de granos recaudados al pueblo y rigurosamente vigilados por los escribas.
Una nobleza privilegiada cooperaba en la administración y explotación de los campesinos, recogiendo gran poder. Este fortalecimiento la llevó a intentar asumir el control directo del Estado.
Se siguió un período de anarquía en que prácticamente cada noble se juzgaba en condiciones de ocupar el trono faraónico; el clero se aprovechó para expandir su poder político, apoyando ora este, ora aquel pretendiente al título de faraón.
Reino Medio (2000 – 1580 a.C)
En esa fase comenzó una nueva dinastía y otra capital: la ciudad de Tebas. El antiguo Egipto se expandió hacia el sur, perfeccionó la red de canales de riego y estableció colonias mineras en el Sinaí. La ambición de los nobles y del clero hizo que el cobre fuera buscado fuera de África, tomando el Egipto conocido de otras poblaciones de Oriente Medio.
Algunos pueblos procedentes de Asia Menor desencadenaron una serie de ataques hacia el valle del Nilo.
Por último, los hicsos, pueblo semita que ya conocían el caballo y el hierro, derrotaron a las fuerzas faraónicos del Sinaí y ocuparon la región del delta de Egipto, donde se establecieron 1750-1580 a.C Fue durante esta dominación extranjera que la hebreos se establecieron en Egipto.
Nuevo Reino (1580 – 525 a.C)
Estuvo marcado por la expulsión de los Hicsos, el desarrollo militar de gran envergadura y el logro de un amplio territorio. Los hebreos eran esclavos y alrededor de 1250 a.C, bajo el liderazgo de Moisés, los Judíos se escaparon de Egipto en lo que se conoce como Éxodo y está registrada en el Antiguo Testamento de la Biblia.
Se llegó a la altura de la civilización egipcia durante el largo gobierno del faraón Ramsés II (1292-1225 a.C), que venció a varias personas asiáticas.
Después de su reinado, las luchas entre los sacerdotes y los faraones debilitan el Estado, lo que estimuló nuevas invasiones. En 525 a.C, los persas dirigidos por Cambises, vencieron a los egipcios en la batalla de Pelusa y, definitivamente, conquistaron la región.
A partir de entonces, Egipto dejaría de ser independiente por lo menos 2500 años, período en que se convertiría sucesivamente, provincia de los persas, territorio ocupado por macedonios, romanos, árabes, turcos y finalmente ingleses.
Las invasiones constantes ejercieron gran influencia en la cultura egipcia, sobre todo el dominio macedónico que permitió la penetración de las ideas griegas.
La importancia del río Nilo
Como la región está formada por un desierto (Sahara), el río Nilo ha ganado una extrema importancia para los egipcios. El río era utilizado como vía de transporte (a través de barcos) de mercancías y personas. Las aguas del río Nilo también eran utilizadas para beber, pescar y fertilizar los márgenes, en las épocas de inundaciones, favoreciendo la agricultura.
Ubicación Geografía de la Cultura Egipcia
Situado en el noreste de África durante la edad antigua, el antiguo Egipto se limitaba al norte con el mar Mediterráneo, al sur con Nubia (actual Sudán), al este con el mar rojo y al oeste con el desierto de Libia.
Su territorio estrecho y largo se dividía en dos grandes regiones: el Alto Egipto (región del valle) y el Bajo Egipto (región del delta del río Nilo).
El valle se compone de una franja que se extiende por las márgenes del Nilo, con cerca de mil kilómetros de largo por diez de ancho.
Por ser una región de clima seco y área desértica, los egipcios de la región del valle supieron aprovechar las inundaciones periódicas del río Nilo para obtener agua y hacer la tierra propicia a la práctica de la agricultura.
Características de la Cultura Egipcia
Una característica básica de la civilización egipcia fue su aspecto altamente místico, que ayudaba a preservar el poder del faraón, identificado con la propia divinidad.
Los egipcios eran politeístas, y sólo en el período de la fracasada reforma religiosa de Amenófis IV se volvieron monoteístas.
El dios de cada nombre era considerado una divinidad suprema, estando su origen ligado al culto totémico de los antepasados tribales.
La unificación del país acabó llevando a una jerarquización de las divinidades, y la adoración de algunos dioses acabó imponiéndose, como Ra, de Heliópolis, y Amón, de Tebas.
También la trilogía de dioses, representados por el padre, madre e hijo (Osiris, Isis y Horus) era venerada por todo el país, teniendo gran penetración en las capas populares.
Como creían en la vida después de la muerte y en la inmortalidad del alma, a través del mantenimiento del cuerpo, desarrollaron una sofisticada técnica de momificación y construyeron los más ricos tumbas de la antigüedad.
A la civilización egipcia también le corresponde la invención de la escritura jeroglífica. Como era una escritura bastante trabajosa, surgió una forma simplificada conocida como hierática, posteriormente simplificada aún más, dando origen a la escritura demótica.
Los escribas o aquellos que sabían escribir, gozaban de gran prestigio y poder entre la aristocracia burocrática y sacerdotal.
Los Egipcios también desarrollaron arquitectura avanzada representada en su pirámides.
La económica estaba basada en la agricultura.
La Sociedad de la Civilización Egipcia
La sociedad egipcia estaba dividida en varias capas, siendo que el faraón era la autoridad máxima, llegando a ser considerado un dios en la Tierra.
Por debajo del faraón y su familia vinieron de las clases privilegiadas (sacerdotes, nobles y funcionarios), y la no privilegiados (artesanos, campesinos, esclavos y soldados). Los sacerdotes formaban junto con los nobles, la corte real. Los nobles formaban una aristocracia hereditaria y componían la elite militar y latifundista.
Sacerdotes, militares y escribas (responsables de la escritura) Ganaron gran importancia en la sociedad. Esta era sostenida por el trabajo e impuestos pagados por campesinos, artesanos y pequeños comerciantes. Los esclavos también componían la sociedad egipcia y, generalmente, eran personas capturadas en guerras. Trabajaban mucho y nada recibían por su trabajo, sólo agua y comida.
La Economía la Cultura Egipcia
La economía egipcia estaba basada en la agricultura, principalmente de trigo, cebada, frutas, legumbres, lino, papiro y algodón. El río Nilo era responsable de mover la economía y garantizar la unidad política al antiguo Egipto.
De sus aguas dependía la vida de miles de personas. La construcción de diques, reservorios y canales de riego, era tarea del Estado. Se desarrollaba la pesca, la caza y la cría de animales. Los trabajadores rurales eran constantemente convocados por el faraón para prestar algún tipo de trabajo en obras públicas (canales de riego, pirámides, templos, diques).
Una característica de la economía era que no había propiedad privada de la tierra, que pertenecía a la comunidad como un todo. Los campesinos y artesanos estaban obligados a dar parte de sus productos al Estado a cambio del derecho de cultivar el suelo.
Los egipcios también practicaban el comercio de mercancías y la artesanía.
Religión de la Cultura Egipcia
La religión egipcia estaba repleta de mitos y creencias interesantes.
La creencia religiosa de los egipcios era de extrema relevancia e influenciaba considerablemente la vida de las personas. Por ser politeístas, los antiguos egipcios creían en varios dioses.
Dos características muy importantes de la religión de los egipcios fueron los conceptos Maat y Heka.
El primer concepto Maat, definía la importancia de vivir una vida correcta, para mantener la existencia armónica en el universo.
El concepto de Heka estaba relacionado con la magia y afirmó la importancia de que tanto en la creación del universo como la manifestación del poder de los dioses.
Dioses Egipcios
Los dioses del panteón egipcio estaban representados de tres maneras diferentes:
- Antropomórfica: forma humana.
- Zoomorfa: forma animal.
- Antropozoomórfica: forma animal humano y, al mismo tiempo.
Entre los principales dioses egipcios, que se pueden destacar Horus, Ra (dios del sol), Isis (diosa de la fertilidad), Anubis (dios de los muertos), Maat ( la diosa de la justicia) y Bastet (diosa de los gatos y la fertilidad). Cada dios ejercía una función diferente, así como poseía sacerdotes específicos responsables de su adoración.
Los sacerdotes en antiguo Egipto podrían ser tanto hombres como mujeres. En general, las sacerdotisas prestaban culto a una diosa, y los sacerdotes a un dios, sin embargo, no era una regla obligatoria. Los sacerdotes de Egipto enfrentaban un largo proceso de capacitación y podían constituir familias como cualquier otra persona.
La momificación y la Vida después de la muerte
Como creían en la vida después de la muerte, momificaban los cadáveres de los faraones colocándolos en pirámides, con el objetivo de preservar el cuerpo. La vida después de la muerte sería definida, según creencias egipcias, por el dios Osiris en su tribunal de juicio.
La momificación era la técnica desarrollada por los egipcios para conservar el cuerpo, pues la muerte sólo separaba el cuerpo del alma. La vida podría durar eternamente, desde que el alma encontrara en el sepulcro el cuerpo destinado a servirle de vivienda. Para ellos, después de juzgada y absuelta por el tribunal de Osiris, el alma venía en busca del cuerpo.
La momificación consistía en extraer las vísceras y sumergir el cuerpo en una mezcla de agua y carbonato de sodio. Después se inserta sustancias aromáticas, como mirra y canela, para evitar el deterioro.
El cuerpo estaba envuelto en bandas de tela, sobre las cuales se pasaba cola especial para impedir el contacto con el aire. Colocado en un sarcófago, el cuerpo era llevado a la tumba, que podían ser simples o inmensas pirámides, donde los faraones tenían lugar reservado en una cámara secreta.
Muchos animales también eran considerados sagrados por los egipcios, de acuerdo con las características que presentaban: chacal (esperteza nocturna), gato (agilidad), oveja (reproducción), jacaré (agilidad en los ríos y pantanos), serpiente (poder de ataque), águila (capacidad de volar), escarabajo (ligado a la resurrección).
La Cultura de la Civilización Egipcia
La civilización egipcia se destacó mucho en las áreas de ciencias. Desarrollaron conocimientos importantes en el área de las matemáticas, utilizados en la construcción de pirámides y templos.
En la medicina, el desarrollo de la práctica de la momificación permitió un mayor conocimiento de la anatomía humana, por lo que es posible realizar la cirugía en el cráneo. Se trataba de enfermedades del estómago, del corazón y de las fracturas.
La preocupación con los flujos y reflujos del Nilo estimuló el desarrollo de la astronomía. Observando los astros, localizaron planetas y constelaciones.
El día estaba dividido en 24 horas. La semana tenía diez días y el mes, tres semanas. El año de 365 días estaba dividido en estaciones agrarias.
Arte de la Cultura Egipcia
El Arte Egipcio nació hace más de 3000 años antes de Cristo y está vinculada a la religión, ya que la mayoría de sus estatuas, pinturas, monumentos y obras arquitectónicas se manifiesta en temas religiosos.
Así, el interior de los templos, así como las piezas o espacios relacionados con el culto de los muertos eran artísticamente elaborados. No es de extrañar, las tumbas son uno de los aspectos más representativos del arte egipcia.
Arquitectura egipcia
El principal arte desarrollado en el antiguo Egipto fue la arquitectura.
Profundamente marcada por la religiosa, se volvió principalmente a la construcción de grandes templos (moradas de los dioses), tales como Karnac, Luxor, Abu-Simbel y las famosas pirámides de Giza (tumbas de los faraones), atribuida a Keops, Kefrén y Micerino.
En este campo podemos destacar la construcción de templos, palacios y pirámides. Estas construcciones eran financiadas y administradas por el gobierno de los faraones.
Muchas de estas construcciones se erigieron con grandes bloques de piedra, utilizando mano de obra esclava. Las pirámides, la Esfinge de Giza y el templo de Ramsés II (Abu Simbel) son los edificios más conocidos del antiguo Egipto.
Escritura Egipcia
La escritura egipcia también fue algo importante para este pueblo, pues permitió la divulgación de ideas, comunicación y control de impuestos.
La escritura demócrata (más simplificada y usada para asuntos cotidianos) y la jeroglífica (más compleja y formada por dibujos y símbolos).
Las paredes internas de las pirámides estaban repletas de textos que hablaban sobre la vida del faraón, rezos y mensajes para espantar posibles saqueadores. Una especie de papel llamado papiro, que era producido a partir de una planta del mismo nombre, también era utilizado para registrar los textos.
Los jeroglíficos egipcios fueron descifrados en la primera mitad del siglo XIX por el lingüista y egiptólogo francés Champollion, a través de la Piedra de Roseta.
La escritura se desarrolló de tres formas:
- Jeroglíficos – escritura tumbas y templos sagrados; la más antigua, anterior a 3000 a.C, compuesta por más de 600 caracteres.
- Hierática – una simplificación de los jeroglíficos. Su uso estaba ligado a la religión y al poder;
- Demótica – escribía populares formada por las señales 350, utilizados en los contratos escritos por los escribas.
La Escultura Egipcia
La escultura egipcia alcanzó el auge con la construcción de grandes proporciones como las esfinges y las estatuas de los faraones. Se merecen atención las obras de pequeño porte como los sarcófagos, de piedra o madera, en los que los artífices buscaban reproducir las facciones del muerto, para ayudar al alma a encontrar el cuerpo.
Se llegaban a incrustar en los ojos, pupilas de cristal. La pintura representaba escenas del día a día, permitiendo hoy reconstruir la vida cotidiana de los egipcios.
La mayoría de las esculturas de Antiguo Egipto son representaciones de los faraones y de los dioses, presentados en formas frontales, estáticas y sin ninguna expresión facial.
Las esculturas de los faraones eran representadas siempre en la misma posición: hombre de pie y con el pie izquierdo al frente, hombre sentado de piernas cruzadas o sentado con la mano izquierda apoyada en el muslo.
Con cuerpo de león (representado la fuerza) y cabeza humana (representando la sabiduría), las esfinges son, sin duda, las esculturas egipcias más famosas. Ellas eran colocadas en las entradas de los templos con el propósito de apartar a los malos espíritus.
Características de la Escultura:
- Formas estáticas
- Formas exentas de expresión facial
- Seguimiento de la convención: de pie o sentado
Historia del Antiguo Egipto
– Alrededor del 3100 a.C, el faraón Menés I funda la Primera Dinastía egipcia al unificar las diversas culturas del Nilo (Alto y Bajo Egipto).
– Alrededor del 2500 a.C, los egipcios empiezan a usar los papiros para producir registros de diversas naturalezas.
– Alrededor del 1580 a.C, comienza a escribir el Libro de los muertos (escritos religiosos y místicos) en papiros. Eran colocados junto a las momias en los sarcófagos, que quedaban dentro de las pirámides.
– Alrededor de 1260 a.C se construyeron dos grandes e imponentes templos, ubicados en Abu Simbel (sur de Egipto). Uno en homenaje al faraón Ramsés II y el otro a su esposa Nefertari. El Templo de Ramsés es actualmente un importante complejo arqueológico y Patrimonio Mundial de la UNESCO.
– En el siglo XIV, el faraón Akentón (Amenhotep IV) y su esposa Nefertiti abandonan el politeísmo e implantan el monoteísmo, a través de la adoración de un solo dios: Aton (era una deidad solar del Antiguo Egipto que representaba al disco solar en el firmamento). Pero el politeísmo volvió después de la muerte de este faraón.